miércoles, 27 de enero de 2016

Me equivoqué

Me equivoqué.

Me equivoqué al amarte en vez de amarme.
Me equivoqué al abrazarte en vez de abrazarme.
Me equivoqué al apoyarte en vez de apoyarme.

Y esos fueron mis errores, creer en ti antes que en mí. Encontrarte antes de empezar a buscarme a mí, y es así como me doy cuenta de lo perdida que estoy.

De los abrazos que me hacen falta, y los besos a los que pasando lista les pongo falta a día 27 de este frío invierno en el que se encuentra mi corazón de hielo.

Me doy cuenta de que por muchas veces que multipliques cinco por cinco seguirán siendo veinticinco, y que no hay mejor abrir de ojos que darte de bruces contra la realidad.

Esa realidad donde soy yo la que me quiero, la que me abrazo, la que me apoyo y la que se encuentra para no perderse jamás. Esa realidad que es posible gracias a ti.

A ti que pensaste que me hacías débil, vengo a darte las gracias por hacerme superior a ti. Porque eres tú quién se las está viendo ahora, cuando aprecias los que hemos dado el paso y hemos crecido como si fuéramos adultos atrapados en cuerpos de niños. Y tú sigues ahí, con cuerpo de mujer, corazón de zorra y para rematar sin pizca de sentido común.

Ven, da la cara y dime que es lo que te hace capaz de intentar pisotearme, porque perdona que te diga, pero la vida es algo más valioso que lo que tu llamas 'personalidad' sí, eso que copias y pegas en ti según a quién le chupas el culo... Ay, qué ironía ¿verdad?

El problema para ti es que lo que me importa son palabras de gente a la que quiero y me quiere, y tú nunca has entrado en esa lista, así que, deja de hacer apuestas, porque tu personalidad apesta.

No voy a dedicarte más palabras, creo que con un 'ojalá y te jodas la vida' tienes para lo que te queda de existencia.

sábado, 23 de enero de 2016

Viento

Me gustaría que el viento te abrazara por cada vez que mis brazos anhelan tu alma, que te rozaran el alma cada vez que te pierdes. Que te dijeran que todo está bien porque él está contigo, que te envolviese entre sus rugidos y te llevase a la calma. 

Me gustaría que el viento se convirtiera en tu refugio, en la cúpula donde tu mundo es posible y poder sobrevivir a base de arte. Porque tu lo eres, tú eres arte.

Me gustaría que el viento se convirtiera en la inspiración para cre(arte).

Me gustaría que el viento te llevara mis palabras para que te envuelvan en el cariño de un corazón que late casi sin fuerza pero sigue adelante. 

Me gustaría que el viento te haga sacar el huracán que llevas dentro, para callar a todos aquellos que te gritaron: 'NO PUEDES'.

Me gustaría que el viento me llevará a ti, o yo convertirme en viento para estar siempre contigo.